Filipp Kirkorov, Tatiana Navka, Inna y Dmitri Malikov en la presentación del nuevo álbum de Jasmin «La chica de Derbent»

      En la sala de conciertos "Barvikha Luxury Village" se celebró la presentación solemne del nuevo álbum de Jazmín "La chica de Derbent", la obra más íntima y emotiva de la carrera de la cantante. El álbum se ha convertido en una declaración musical de la artista sobre su amor por sus raíces, su tierra natal y el legado familiar, transmitido con cuidado a través de canciones, tradiciones y recuerdos.

      El nuevo álbum de Jazmín no es solo un trabajo musical, sino una confesión personal y una dedicación a su padre —el coreógrafo, meritorio trabajador de las artes de la República de Daguestán Lev Monakhimov—, un hombre cuya energía creativa y amor por la música guiaron a la cantante desde su infancia. Las melodías orientales siempre han formado parte del mundo interior de la artista: «Esas melodías están en mi ADN. Crecí entre ellas, las absorbí desde muy pequeña. Con el tiempo las canciones se fueron acumulando como cuentas de un collar de perlas, hasta que un día supe que era hora de reunirlas en un álbum. Es muy cálido, muy honesto».

      Este lanzamiento para la cantante es la oportunidad de volver a tocar sus orígenes y compartirlos con el público, de volver al lugar donde todo comenzó: al cálido y soleado Derbent, que vive en cada nota del nuevo álbum. «La ciudad de Derbent, Daguestán, son mis raíces, mi juventud, mi familia —reconoció Jazmín—. Cada canción nació de los recuerdos de mi infancia, de las personas y los lugares que me formaron. Dedico este álbum a mi papá, un hombre de alma y talento increíbles, y siento que continúo su camino».

      Para los invitados de la velada la artista creó una atmósfera única de Derbent, la ciudad de su infancia y juventud. El espacio "Barvikha Luxury Village" fue ambientado con el colorido oriental y sumergía en la atmósfera e historia de Daguestán. Jazmín recibió personalmente a los invitados y ofreció un recorrido por su querida Derbent, convirtiendo la presentación del álbum en un cálido y entretenido viaje por las calles de la ciudad que para ella no solo es su tierra natal, sino también fuente de inspiración, guardiana de las tradiciones familiares y una parte especial de su vida. En el vestíbulo de la sala de conciertos se colocaron zonas fotográficas temáticas y espacios interactivos, donde artesanos mostraban oficios populares de Daguestán: alfarería, tejido de alfombras, viticultura y repujado. Se podía visitar un mercado de frutas improvisado y degustar baklava, halva y otros dulces orientales, y una pitonisa invitada ofrecía a quienes lo deseaban leer su destino en los posos del café.

      A felicitar a Jazmín por el estreno del nuevo álbum acudieron amigos famosos: Filipp Kirkorov, Tatyana Navka, Dmitri e Inna Malikov, así como muchos otros colegas y allegados. En el escenario se unieron a la cantante Soso Pavliashvili, Denis Klyaver, Avi Benedi y Arsen Shakhunts, engalanando la velada con actuaciones conjuntas. Los asistentes destacaron que el nuevo álbum resultó sorprendentemente cálido, emotivo y muy personal. Muchos comentaron que en la música de Jazmín se siente la autenticidad y que los motivos orientales suenan particularmente conmovedores.

      En el marco de la presentación del álbum "La chica de Derbent", Jazmín también recordó otro de sus estrenos destacados: el videoclip de la canción "Yo soy Libra, tú eres Virgo", en el que por primera vez apareció con la imagen de una mujer astronauta. El trabajo salió hace muy poco, pero ya logró atraer la atención del público por su inusual concepto visual e historia. El director del video, Eugene, y el compañero de rodaje de la cantante, el actor y cantante Tornike Kvitatiani, viajaron para felicitar a Jazmín en persona. Los colegas le hicieron a la artista un regalo inesperado: un auténtico casco espacial. «Tuve el sueño de volar al espacio. Por ahora solo se ha hecho realidad en el videoclip —sonrió Jazmín—. Pero creo que algún día ocurrirá también en la realidad. Muchísimas gracias a Eugene: juntos rodamos un bonito cortometraje cuya trama cuenta cómo mi nave se estrella y me salva un hermoso nómada, Tornike. Él permitió que lo llamáramos Tor, y en el videoclip eso resultó muy simbólico».